¡Ay, amigo submarino!
Yo también pongo de mi parte el bote de pintura, la brocha y a mí mismo de voluntario. Sin embargo, veamos un par de cosas:
· A los políticos no les interesa nada, como te dice el compañero Montañés

. Tampoco sé, si los militares verían con buenos ojos que civiles, y voluntarios, como nosotros, con nuestros actos les afeáramos su desinterés. No es desdeñable tampoco el impedimento de cualquier clase que nos pondrían cualquiera de estos dos estamentos, politicastros (políticos ya no quedan) y militares.
· No sé si hay intención de restaurar el casco, o también tratar de restaurar el interior. Sé que cuando el submarino se desechó por la Armada (notable falta de visión del Almirante Beránguer), componentes vitales fueron trasladados al Arsenal de Cartagena. Desconozco si siguen allí, aunque lo dudo. En ese caso, el repintado, por más voluntarioso que sea, no debe tomarse a la ligera. No es cuestión de estropear algo por más voluntad que se le ponga. En el caso de que no se vaya a restaurar por dentro, me apunto a
la fiesta de la brocha.
Al margen de todo esto, ¿alguno de vosotros no estaría encantado de pertenecer a una Organización para la Conservación del Patrimonio de la Armada (privada, claro, de lo público ya conocemos su interés) y por tanto de nuestro patrimonio?.
Dejo la pregunta en el aire. Yo me apuntaría sin dudarlo. ¿Opiniones del motivo de la inexistencia de tales Organizaciones aparte del desinterés estatal o su perfídia?.
Un saludo a todos,
Santi
